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Opinión

Mitos del mercado interno y el dólar barato

Jesús Leguiza

El país no saldrá de la crisis agravada por la pandemia y la cuarentena si los gobernantes siguen pensando solo en el mercado interno y en el dólar barato.

El mercado interno es muy pequeño en un mundo de más de 7.200 millones de habitantes, de los cuales existe una razonable proporción con un nivel de ingresos medios-alto vs. 45 millones de argentinos con ingresos medios-bajo y para abajo.

Las autoridades ni siquiera hacen un favor (con el pensamiento de ayuda a la industria nacional) a través de promociones, protecciones y ayudas para el abastecimiento o consumo interno.

El peso no debe estar sobredevaluado ni subvaluado. Debe ser de equilibrio, o sea indiferente para comprar/vender productos nacionales o importados.

Por otro lado, esa industria local, nacional, debe ser competitiva por si misma, por productividad del capital y la mano de obra. No por un dólar barato ni por un dólar caro.

El Estado tampoco puede subsidiar o dar incentivos artificiales porque está quebrado y así seguirá; solo busca licuar sus deudas en pesos con la inflación creada. De manera, que la intervención y/o participación del Estado, por ahora, es inexistente. No puede subsidiar ni puede cobrar más impuestos.

La solución es el plan que falta.

Detrás de cada objetivo, ya sea salir del pozo (la crisis) y para iniciar la recuperación, siempre es necesario un plan y una estrategia.

La estrategia es hija del objetivo y madre del plan. Si la estrategia no funciona se cambia el plan pero no el objetivo.

Es bueno recalcar que la conducta del Estado y sus políticas económicas se repiten cíclicamente. Funciona así desde 1919, o sea hace 101 años.

Ese ciclo es clarísimo e independiente a los pensamientos de izquierda o derecha, de conservadores-liberales o intervencionistas, de democracias o gobiernos de facto, todo ha sido y es igual.

En realidad, los ciclos económicos del país están ligados a los dos mercados, externo e interno, en forma conjunta.

El mito es creer que el «mecanismo» se pone en marcha con un peso sobrevaluado para iniciar una etapa de recuperación con el aumento de la producción industrial «nacional» vinculada al consumo interno; sin saber que ello provoca un incremento de las importaciones de bienes de capital (tecnología) e insumos básicos. Esto reduce las exportaciones por mayor consumo interno dada la mayor demanda interna originada por la suba del salario real y los niveles de ingreso de la población asalariada. (hoy dudoso por la cuarentena).

Luego aparece el déficit comercial y la disminución del ingreso de divisas que conlleva necesariamente a una devaluación del peso, lo cual provoca un aumento de los precios de los productos del agro exportables (transables) y de los insumos importados. Esto, su vez, genera una crisis del sector externo, procesos inflacionarios y políticas monetarias contractivas. Todo sin considerar la pademia y las variaciones de los precios internacionales como la baja del precio de los granos y/o la suba del precio del petróleo y otros productos significativos en el comercio exterior.

Y la deuda externa ? No se arregló para nada, se pospuso y no se podrán pagar los intereses.

Lamentablemente este mecanismo es recurrente y sigue igual; ahora con la bienaventurada excusa de la pandemia.

Nada cambiará y vamos, de ciclo en ciclo, cada vez peor !!

Ver este hilo:
https://m.facebook.com/story.php?story_fbid=10217574788302165&id=1251474424

«Entre esos tipos y yo hay algo personal»

«Probablemente en su pueblo se les recordará
como cachorros de buenas personas,
que hurtaban flores para regalar a su mamá
y daban de comer a las palomas.»

-Por los nuevos de Ministerios
-Por la Emergencia ocupacional de 180 días
-Por la doble indemnización
-Por la postergación del pago de las LETE»s
-Por la Agencia Federal de Inteligencia
-Por la Reperfilación del pago del Bono Dual
-Por la Derogación de la Agencia de Protección de Testigos/Imputados
-Por la modificación de la Ley de Inteligencia y limitación de funciones de los espías
-Por la emergencia sanitaria de un año por el Covid 19
-Por facilitar la compra directa de insumos para el Covid 19 y …
-Por el aislamiento social preventivo y obligatorio
-Por las extensiones del aislamiento social preventivo y obligatorio
-Por el cuento de la Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción
-Por decir que tiene que mantener a los jubilados genuinos

«Probablemente que todo eso debe ser verdad,
aunque es más turbio cómo y de qué manera
llegaron esos individuos a ser lo que son
ni a quién sirven cuando alzan las banderas»

-Por el relato de la deuda pública eterna
-Por las amenazas de las expropiaciones
-Por los cortadores de silos-bolsa
-Por la cuarentena eterna
-Por tener a todos encerrados en sus casas
-Por los niños sin escuela
-Por los que no pueden trabajar
-Por los presos sueltos
-Por los ladrones libres
-Por las zonas liberadas
-Por los muertos en los geriátricos
-Por las moratorias a medida
-Por el Ministro de Salud
-Por la Reforma del Poder Judicial
-Por la impunidad retroactiva
-Por los ladrones con tobillera
-Por decir todos, todas y todes

«Hombres de paja que usan la colonia y el honor
para ocultar oscuras intenciones:
tienen doble vida, son sicarios del mal
Entre esos tipos y yo hay algo personal»

Esta lista de 60 medidas no está completa, habrá que esperar hasta fines del año 2023.

«La falsa economía»

Alan Beattie – 27/7/2020

«El problema de Argentina no fueron los ´70 años de Peronismo´, sino los ´120 años de Oligarquía´».

Esta frase es de Alan Beattie, ex economista del Bank of England y hoy editorialista del prestigioso periódico inglés, el «Financial Times»

En su libro “Falsa Economía: una Sorprendente Historia Económica del Mundo”, Beattie se pregunta por qué Argentina no fue EEUU y su respuesta es simple: mientras EEUU repartió la tierra en parcelas pequeñas, Argentina se la dio a unas pocas familias.

“EEUU favoreció a colonos usurpadores, Argentina a terratenientes”. El resultado inmediato fue que mientras en EEUU la poca tierra obligaba a innovación para optimizar y mejorar ganancias, al latifundio argentino le alcanzaba con vacas, ovejas y alambre de púa.

“Las economías rara vez se hacen ricas solo con agricultura, Gran Bretaña había mostrado el camino: industrialización” pero las élites argentinas rechazaron la industrialización para seguir mamando de la teta de la explotación agropecuaria latifundista.

“Entre 1880 y 1914 el sistema político norteamericano se adecuó dinámicamente a los cambios y las demandas de su población. El sistema argentino permaneció obstinadamente dominado por una minoría autocomplaciente”.

Dice Beattie que EEUU hubiese sido como Argentina si el Sur racista confederado hubiese ganado la Guerra Civil. Al final de la 1ra guerra, las exportaciones de granos y carne cayeron. Al final de los 1920s, las exportaciones ya eran 2/3 menos. EEUU ya había comenzado un proceso de recambio económico. Las elites argentinas la rechazaron.

EEUU había comenzado su recambio económico con industrialización, y al final de la 1ra Guerra invirtió ahorros propios en quedarse con industria europea (si recursos después de la guerra) y se posicionó como potencia mundial. La Argentina oligárquica desapareció del mundo.

Además de haber invertido sus primeros años de bonanza en un recambio industrial y usar esos recursos para adueñarse de la industria del mundo destruida por la guerra, EEUU ya era una economía de escala. Argentina no fue nada de eso. Lo dice un economista liberal del Financial Times, nada cerca del “populismo”, todo lo contrario.

¡Arreglar la deuda no arregla nada!

Los que encuentran que la deuda pública es causa de todos los males distorsionan la realidad, se mienten a sí mismos y a la población, que termina confudida.

Los primeros «buitres» son los que gobiernan y gobernaron que quieren «quitas», p.ej. Nestor Kirchner, para cancelar con el FMI, se endeudó con Venezuela a tasas de interés el triple de altas, o sea, préstamos muchísimo más caros.

Los acreedores, por otra parte, aflojan «un poco», un poquito por lástima de los pocos países bobos que cultivan este autoengaño.

Ahora, dentro de días pretenderán inundar con noticias sobre el «éxito» de la refinanciación. NO se pagó nada y las quitas, de pura lástima, no fueron nada. Es por ello que ni siquiera les interesa a los tres grupos de acreedores que se diga que los planes económicos no sirvan o no gusten. Estos grupos -el Grupo Ad Hoc (BlackRock), el Exchange Group (Monarch) y parte de los integrantes del Comité de Acreedores de Argentina- poseen tres cuartas partes de nuestra deuda de vencimiento en 2020.

Un plan, sobre todo para el pensamiento intervencionista, es la hoja de ruta para alcanzar una meta. El país está a la deriva, no tiene meta. Ningún viento le vendrá bien.

El problema no es la deuda ni quien nos endeudó, fueron todos los gobiernos (desde la época de Rosas).

El tema es cómo pagar los intereses anuales, cómo generar confianza para que el riesgo país sea bajo y, por ende, los intereses.

En fin, cómo haremos para lograr sucesivas balanzas de pagos con suficiente superávit, si estamos en un marco de políticas monetarias y fiscales que caminan en contra de las inversiones reales (nacionales o extranjeras) y en contra de exportaciones competitivas, que se originan en el campo.

JL

Fuga de Capitales

Jesús Leguiza – 20/08/2020

Es necesario aclarar algunos conceptos con números para evitar que el término fuga de capitales sea utilizado con tanta mala leche, sobre todo por los políticos, funcionarios y fanáticos oficialistas.

Existen tres formas o métodos distintos para medir la fuga de capitales:

a) El BCRA lleva una cuenta denominada Formación de Activos Externos (FAE). Esta cuenta registra las divisas (moneda extranjera) que salen del sistema financiero.
b) El método residual de la Balanza de Pagos considera como fuga a todos los dólares que ingresaron al país y no se sumaron a las reservas del Banco Central, es decir, no ingresaron al sistema financiero nacional.
c) El tercer método para medir la fuga es una estimación del INDEC mediante la Posición de Inversión Internacional, que “intenta» medir el valor de los activos que tienen los argentinos en el extranjero.

La fuga puede ser legal o ilegal. Las divisas (dólares) pueden salir o no entrar por las fronteras o quedarse dentro de los límites del país.

Ejemplos de fuga de capitales:

a) Empresas nacionales o extranjeras que giran sus ganancias o resguardan sus activos
b) Empresas nacionales o individuos que invierten en otros países.
c) Exportadores que dejan el producido de sus ventas o partes de las mismas en el exterior o sub-facturan (ilegal)
d) Importadores (algunos) que sobre-facturan sus compras (ilegal)
e) Narcotráfico, tanto la salida de drogas como el no ingresos de divisas. (ilegal)
f) Argentinos que hacen turismo o compran dtos en otros países
g) Residentes (ciudadanos) que protegen sus ahorros en divisas (dólares) que ni siquiera salen de país (cajas de seguridad, colchones, etc.)

La fuga de capitales es desde siempre. El primer préstamo que la Argentina tomó fue el empréstito de la Baring Brothers de Inglaterra por 1.000.000 de libras esterlinas. Al país ingresó solo la mitad. Qué pasó?… Comisiones, gastos (mínimos) y casi todo corrupción.

Para aclarar el panorama y sin carga ideológica, en la Argentina actual y solo desde el 2003 al 2007, durante la presidencia de Néstor Kirchner, la fuga de divisas fue de US$ 17.250 millones.
Durante la primera presidencia de Cristina F. de Kirchner la salida de divisas fue de US$ 70.135 millones y en su segundo mandato fue de US$ 14.775 millones (con cepo), un total de US$ 84.900 millones.
Y, en el periodo presidencial de Macri la salida de divisas fue de US$ 87.469 millones, todo según los registros del BCRA.

Cuando no existe confianza en los gobernantes y/o en sus políticas económicas se fugan capitales. Más controles más fuga, a mayores controles se multiplica la corrupcion

Por último, un ejemplo sencillo: Si mañana, los 45 millones de argentinos compraran o pudieran comprar tan solo 100 dólares c/u para resguardarse de la inflación, en bancos o cuevas, se estarían fugando 4.500 millones de dólares. Los dólares «guardados en el colchón» constituyen una porción pequeña.

La fuga es consecuencia de la desconfianza y las malas políticas !!

Al igual que la deuda externa o la emisión monetaria sin respaldo, no son la causa de los problemas. La única causa son los excesivos gastos del estado.

Lamentablemente la solución está en manos de problema !!!

Se calcula que existen, en el exterior, más de 400.000 millones de dólares de argentinos, principalmente de empresas, cifra que es el doble de los registros o estimaciones oficiales.